El creciente comercio internacional y el tránsito de viajeros favorecen la extensión de las plagas a otros continentes y países. Eso es lo que al parecer ha sucedido con una nueva especie de termita que ha sido detectada en Tenerife. Se trata de una especie de termita subterránea (Reticulitermes Flavipes ) que aunque es originaria del este de Estados Unidos, también se había detectado en el oeste de Francia y en Austria.
Esta termita no difiere mucho en su comportamiento de la especie de termita subterránea habitual que ataca nuestros hogares (Reticulermes spp.). También son subterráneas, están organizadas en castas, y mudan su exoesqueleto de la misma forma. Es por ello que el tratamiento habitual para eliminar termitas mediante cebos debe ser igual de efectivo que con las termitas locales.
Sin embargo es cierto que esta nueva especie invasora es una de las más destructivas y por ello será necesario delimitar su extensión y tomar las medidas necesarias para evitar su extensión a otras regiones. Fue detectada por una empresa especializada en eliminar termitas, y al observar ciertas características diferentes a las habituales, decidieron realizar un análisis genético. El reconocido especialista David Mora confirmó tras el análisis que se trataba de la especie Reticulermes Flavipes, y que tratarán de eliminarlas mediante el tratamiento habitual mediante cebos. El tratamiento se basa en inhibir la capacidad de las termitas para mudar su exoesqueleto, retrasando lo muerte de las mismas hasta la época de muda, de modo que no identifiquen el origen del veneno y mueran todas al mismo tiempo.
En esta ocasión deberán prestar especial atención al número de zonas afectadas para evitar su extensión al resto de la isla e incluso al continente. Se cree que las termitas han podido llegar a la isla en una embarcación. Debido a que las termitas son capaces de especializarse desde su fase de ninfas hasta adultas, unos pocos ejemplares pueden ser suficientes para generar los individuos necesarios para crear una nueva colonia.