Dentro de la amplitud de especies de termitas que hay en el mundo hay algunas que son más problemáticas que otras. Teniendo en cuenta las diferentes especies hay dos que crean bastante confusión y que su presencia es habitual a nuestro alrededor. Se trata de las termitas subterráneas y de la madera. A fin de que entiendas las diferencias entre ambas, hoy vamos a explicar sus principales características.
Una de las plagas más importantes que afectan a los inmuebles, sobre todo si tienen ya unos años, son las termitas. Las estructuras de madera son el reclamo perfecto para este xilófago, y las empresas de eliminación de termitas se esmeran en aplicar los tratamientos adecuados para poner freno a este insecto.
De las más de 2.000 especies que hay solo algunas se consideran plagas por si interacción con el ser humano. Por ejemplo a nivel estatal, la termita subterránea y la termita de la madera suponen un grave problema ya que se alimentan de la madera, celulosa etc. que hay en hogares con el consiguiente problema que puede conllevar.
Por eso, conocer más de ellas y saber diferenciarlas nos podrá ayudar a prevenir daños mayores, así como establecer un método de desinsectación acorde a la especie.
¿Cuáles son las diferencias entre termitas subterráneas y de la madera?
La primera diferencia entre estas especies de xilófagos es su zona de actuación. Las subterráneas suelen aparecer en edificios de cascos urbanos, llegando a afectar a un gran número de ellos. Por su parte, las de la madera, donde hay que diferenciar dos tipos madera seca o madera húmeda, construyen sus nidos dentro del mismo material.
Otra disparidad es la forma de desplazarse. La subterránea, como su nombre indica, lo hace bajo tierra. Crean túneles para desplazarse de un lugar a otro, mientras que las de la madera se mueven por dentro de la madera infestada.
También debemos prestar atención a las zonas de infestación. Las de la madera seca sobreviven en lugares con alto índice de humedad, ya que obtienen el agua de la madera que consumen. Por su parte, las subterráneas viven bajo tierra y se aprovechan de su humedad para subsistir.
Por último tendremos que centrarnos en las señales de su presencia. Si una de las características principales en la detección de termitas subterráneas son los túneles que fabrican con restos de tierra, heces, madera y saliva, las de madera seca dejan una especie de “serrín” al lado de la estructura. Esta sustancia no es otra cosa que restos fecales de esta termita que deja junto a su “víctima”.
De todas formas, detectar la presencia de este xilófago es bastante difícil, por lo que la única solución es ponerse en manos de una empresa de eliminación de termitas. Sin embargo, saber la diferencia entre termitas subterráneas y de madera puede ayudarnos a proteger nuestro inmueble y a estar atentos ante cualquier variación en las estructuras fabricadas con este material.