El poder destructivo de las termitas es de todos conocido. Su gran capacidad para alimentarse de madera hace que cualquier estructura construida con este material pueda sufrir graves daños. Ejemplos hemos visto muchos en viviendas, monumentos históricos etc. Eso sí, a muchas personas les pica la curiosidad sobre cómo encuentran las termitas alimento, teniendo en cuenta que están bajo tierra.
Cualquier empresa de eliminación de termitas podrá darte esta respuesta sobre este xilófago, pero a groso modo podemos decir que se basan en factores químicos y medioambientales. Por eso, cada vez es más importante investigar sobre este aspecto ya que puede ser una herramienta más para evitar sufrir una plaga.
De todos es sabido que la principal fuente de alimento de las termitas es la madera. Muebles, vigas… cualquier objeto fabricado con celulosa puede ser el objetivo de este insecto. Sin embargo, ¿Cómo pueden detectar que un determinado inmueble está fabricado con este material?
Las termitas es un insecto social que se desplazan desde el termitero creando túneles con el fin de encontrar alimento e impedir repetir la misma zona. Se dividen en grupos en busca de fuentes de alimento en un determinado espacio. Esta área puede variar dependiendo del tamaño de la colonia, números de miembros etc.
Asimismo, este xilófago puede desplazarse para entrar por cualquier pequeña grieta y moverse por el interior de los objetos o construyendo pequeños túneles por el exterior, de ahí su difícil localización. Es una especie fotosensible por lo que la luz supone un grave problema para ellas.
¿Qué comen las termitas?
Como hemos dicho anteriormente, las termitas encuentran alimento mediante dos factores: señales químicas y medioambientales.
La humedad y la temperatura son dos aspectos muy importantes a la hora de sufrir una plaga de termitas. Edificaciones construidas en zonas con altos índices de humedad tienen más probabilidades de sufrir la voracidad de este insecto. Además, también cuenta el material del que está compuesto el suelo. Si es un material frágil, las termitas pueden construir túneles de manera más rápida y sencilla.
Tras las factores medioambientales tocas dar paso a las señales químicas. Este xilófago tiene la capacidad de detectar el olor de plantas y madera en descomposición. Una vez localizada una fuente de alimento, las termitas regresan a la colonia liberando una serie de feromonas para que el resto de miembros tengan una guía por donde desplazarse. De esta forma construyen túneles más resistentes para que sea más sencillo la obtención de alimento.
La minuciosidad y laboriosidad con la que este insecto encuentra comida es admirable y su detección no es nada sencilla. Por eso, las empresas de eliminación de termitas siempre insisten en que la mejor manera de hacerles frente es con unas labores de prevención. Un tratamiento contra las termitas es costoso y largo en el tiempo por lo que toda medida es poca ante este pequeño xilófago.